Las cejas antes de una laminación suelen estar mal definidas, con una forma irregular y con muchos pelos rebeldes. Después de una laminación, las cejas tienen un aspecto mucho más definido y cuidado. Las cejas aparecen más pobladas, con una forma armoniosa y uniforme, y los pelos se alisan, lo que da un aspecto mucho más natural. Además, la laminación dura entre 4 y 5 semanas, por lo que el efecto dura mucho tiempo sin necesidad de retoques.